Vivir en carne propia la «Bronca»

Es gracioso, pero no gracioso de risa, gracioso de irónico deshumano. Te adelanto que a diferencia de los textos anteriores, este sí es sobre ti y sobre mí.

A mis lectorxs les anticipo que esta redacción contiene espoilers sobre esta serie en Netflix.

Desde el minuto uno de Bronca me recordó mucho a la pelea con la que nos aprehendimos estas semanas, pude transitar durante toda la serie y preguntarme ¿hasta que punto estamos dispuestxs a causarle sufrimiento a la otra parte porque asumimos que nos hicieron más daño del que hicimos?

Nos hicimos daño, para mí no hay duda, eso fue más que mutuo.

No sé que pasa por tu vida, en realidad no quise involucrarme demasiado sobre lo que es de ti ahora, genuinamente no me causaba curiosidad ni quería saber si eras distinto, no quise arriesgarme. Asumo la predisposición de dudar y mantenerme a la defensiva de acuerdo con mi conocimiento sobre ti.

Sé que no me gusta tu tono de burla, tampoco me gusta que conversar contigo resulte más un debate obligado, menos congenio en invertir energía en explicarle a alguien que ya asumió desde antes de escuchar que tiene la razón. Puedes llegar a ser una persona muy fea cuando las cosas no se cumplen como quieres y cuando quieres, en medidas que parecen sutiles -pero no lo son- sabes manipular perfectamente.

Entonces, ¿por qué estaba contigo? Me preguntaste, después de que te dije lo anterior.

Te comparto mi reflexión. Me gustaba estar contigo en los momentos donde eras sincero, donde no tenías que pretender a través de la exageración o hacerte el tonto; sentía respeto por ti y tu inteligencia; te admiraba porque no nos dedicábamos a lo mismo y por todo lo que te habías hecho cargo sin ser tu obligación; se me hacia tierno que quisieras solucionarme la vida, no lo compartía, pero se me hacía lindo; era fan de escucharte hablar cuando te nacía sin que tuviera que hacerte preguntas; me gustabas tú.

Mi intención no es atacarte, solo describo, necesitamos madurar ambas partes, ahí va lo mío.

¿Cuál es mi responsabilidad en esta Bronca?

Callar con lo que no estaba de acuerdo, aceptar y realizar actividades con las que no se alineaban mis ideales, no cuestionarme personalmente mi estancia en la relación, dejar que lo emocional me desbordara y llevar lo mío hacia la relación, no aceptar que no éramos compatibles desde el comienzo, insistir en acciones porque no sabía como terminar directamente con el vínculo, ejercer violencia secundaria como respuesta a la violencia dentro de la relación, avivar y echarle leña al fuego incluso cuando ya no había nada de por medio. Responder, atacar cuando me sentí herida, explotar ante el hartazgo y hacerlo personal -más de lo necesario-.

Por la unión de lo anterior, Bronca me recordó a un nosotros que bien a bien solo existe por la motivación del dolor de la otra parte. No se me hace sano, ni la mejor forma de gestionar lo que pueda acontecer en el ahora de nuestras vidas, pero supongo que era el escape que habíamos encontrado. Ya no lo hagamos, pero sí hay que hacernos responsables de lo que sí provocamos con toda la intención en la otra parte.

Soy capaz de decirte que lo lamento, fue caótico, mucho más cuando implicó querer y apreciar a alguien antes -en esto no se parece a Bronca-, que se termine aquí, por favor.

Este es el tráiler de Bronca:

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: